GRAZALEMA  Es lunes, el posterior a la festividad de la Virgen del Carmen (16 de julio), y en las calles y plazas de Grazalema, encaladas y engalanadas para la ocasión, se respira alegría, ilusión y cierta tensión.

Como ocurre desde hace décadas, los grazalemeños esperan impacientes la suelta del primer Toro de Cuerda, que, atado por una maroma, es llevado por los mozos de la peña ‘Lunes del Toro de Cuerda’ por un circuito totalmente vallado.

Las carreras se suceden desde el máximo respeto al animal y grazalemeños y visitantes (uno puedes ser tú) protagonizan espontáneas carreras al refugio de rejas y casas.

Es la fiesta con mayor arraigo en la localidad y uno de los Toros de Cuerda más antiguo de toda España. Entre carrera y carrera, bares y restaurantes invitan al descanso y el aprovisionamiento de fuerzas en torno a la mejor gastronomía grazalemeña.